EL DICTADOR MACRON Y EL GLOBALISMO.
El dictador Macron vence en Francia a la, sobre el papel, derechista Marine Le Pen. El feminismo sentido, quizás no el de pancarta, pierde así, la oportunidad de contar con una dama rigiendo sobre los destinos de una nación, en contra de las apariencias, más masculinistas de Europa.
Ese mismo dictador que anunció que quería joder, emmerder, a sus conciudadanos y electores; a una gran parte de los mismos, que lo sostienen con sus impuestos. Para quien no sepa de qué va esto, aclararemos, que se refería a los no inoculados con la sustancia génica a la moda; grupo mucho más numeroso en aquél país que en nuestra buenista España.
El único dato esperanzador de la noticia es el alto índice de abstención, según datos de las fuentes oficiales, en torno al 28%; un porcentaje muy inferior, por cierto, al de descontento e indignación.
Sería muy saludable, desconectarse, renunciar a la idea caduca de que los políticos, la nueva nobleza, según acuñación del abogado contra la demagogia, señor Aitor G. van a sacarnos de los apuros en que ellos mismos nos han sumergido, como fieles lacayos de los amos del mundo, esos mismos que pactan e inducen guerras, para justificar los precios abusivos, impuestos criminales y conculcaciones de derechos fundamentales en nombre de la salud y nuestra seguridad nos imponen.
Estamos viviendo la supuesta paradoja de ser sometidos a métodos de control de población comunistas en el capitalista occidente.
Manuel De Français.